¿Sabías que si cuidáramos nuestra salud con unos hábitos saludables podríamos conseguir que las enfermedades cardiovasculares dejaran de ser la primera causa de muerte en el mundo? Pequeños cambios en nuestra vida cotidiana como comer y beber de forma más sana, hacer ejercicio y abandonar el tabaco conseguirían reducir los 17,5 millones de muertes anuales prematuras por enfermedad cardiovascular. Sin embargo, si continuamos con nuestro estilo de vida actual se calcula que esa cifra no solo no descenderá sino que alcanzará los 23 millones de muertes anuales en el año 2030.
Existe una serie de recomendaciones para crear entornos más saludables para el corazón. Los ambientes en los que se vive, trabaja y juega repercuten directamente en la salud; en este sentido, cada individuo tiene derecho a tomar decisiones saludables para el corazón pero, muchas veces, al encontrarse en entornos desfavorables esa capacidad es limitada. Aquí te damos algunas sugerencias con el fin de conseguir una mejor calidad de vida:
Alimentación
-Disminuir las comidas rápidas o chatarra, y las cantidades de sal, azúcar y grasas.
-Incorporar frutas y vegetales frescos en la dieta.
-Prepararle alimentos saludables a los niños para que los consuman en la escuela.
Tabaco
-Evitar que se fume dentro del hogar.
-Estimular a los integrantes del grupo familiar para que abandonen el hábito y, de esta forma, evitar que los jóvenes comiencen a hacerlo.
Ser más activo
-Limitar el número de horas frente al televisor y computadora.
-Organizar actividades familiares al aire libre.
Conocer el propio riesgo cardiovascular
-Visitar al médico para conocer los niveles de presión arterial, colesterol y glucemia.
-Evaluar el peso corporal y el índice de masa corporal. Con esta simple medida se puede estar en conocimiento sobre el nivel de riesgo que se posee.
-En función del riesgo de cada persona, llevar a cabo las acciones necesarias para disminuirlo.
Medidas a nivel de la comunidad
-Incrementar el nivel de educación física en las escuelas y facilitar el acceso de los niños al ejercicio.
-Aumentar el número de espacios verdes y las actividades al aire libre.
-Acceso a sitios con alimentación saludable en las cercanías de los espacios públicos, escuelas y hospitales.
-Incidir en las personas que toman decisiones sobre los temas de la comunidad.
A nivel de los gobiernos
-Regular la publicidad en radio y televisión sobre comidas rápidas o no saludables.
-Disminuir los impuestos sobre frutas y verduras.
-Regular y controlar la venta y el consumo de tabaco y alcohol.
-Detectar la población de alto riesgo y disminuir el costo del tratamiento efectivo.
Cuida tu corazón y recuerda que es fundamental mantener una dieta saludable y la práctica habitual de ejercicio.