jueves. 25.04.2024

El conjunto de Juan de Mena no dejó que el Uni Girona se relajara en ningún momento y peleó pese a ver por detrás en el marcador por el gran acierto de las catalanas y algunas decisiones polémicas de la pareja arbitral que acabaron enfadando a jugadoras, público y cuerpo técnico.

El Uni Girona sudó para llevarse la quinta victoria de la temporada, la que le deja como líder en solitario al caer esta misma tarde Gernika frente a Conquero. Pudo romper el partido en el tercer periodo pero de nuevo el Zamarat se mostró como un cuadro combativo que nunca se rinde y que pelea hasta el final. Lo saben muy bien los rivales que ya habían pisado el Ángel Nieto o el Campus Promete que, cuando parecía tener el partido ganado, acabó sufriendo la victoria naranja.

En esta ocasión el juego de las zamoranas se elevó respecto a otras semanas, reduciendo el número de errores y minimizando los malos minutos en los que en otras ocasiones se le iban los partidos o se le complicaban en exceso. Girona se fue escapando en los tres primeros periodos, casi sin que el público se diera cuenta. Punto a punto, gota a gota. El Zamarat no tuvo esos minutos malos que dejaban al cuadro rival romper el partido, pero Girona tampoco flaqueó en los mejores momentos de las zamoranas.

Se fue con ventaja de cuatro Girona entre el abucheo del público por un par de acciones discutibles de la pareja arbitral que condenaron al Zamarat a tener que remar en el segundo tiempo tras haber ido controlando el partido en la primera parte. Fueron dos acciones en el último minuto en las que el Ángel Nieto se sintió perjudicado y que hubieran deparado un resultado todavía más ajustado en el tiempo de descanso.

Salió guerrero el Zamarat en el tercer periodo, el de las remontadas, pero se encontró con los mejores minutos de Girona. Pese a que la defensa de las de Juan de Mena fue buena, Ifi Ibekwe y Brittany Chambers lograban canastas imposibles que no permitían que Zamarat bajara a renta. El acierto en el fallo exterior, especialmente el de Marina Delgado que movió bien al equipo y aportó un plus de agresividad en defensa, pero estuvo nula en el tiro (0/6 en tiros de 2 y 0/6 en tiros de 3); y la imposibilidad de encontrar con claridad a las pivots hacían que la ventaja fuera aumentando gradualmente.

Girona llegó a la decena de puntos casi sin que el pabellón se diera cuenta y Juan de Mena intentó frenar la ventaja con un nuevo tiempo muerto en el que cambiar algunas de las cosas que estaban haciendo las zamoranas, especialmente en ataque. Cuando parecía que el equipo quería volver al partido, volvieron a aparecer un par de decisiones polémicas de los colegiados que le acabaron costando una técnica a Juan de Mena por las protestas.

Con doce abajo y ante el líder, cualquier equipo se habría rendido, pero el Zamarat siguió insistiendo y Mieloszynska encontró aro con facilidad cuando las catalanas se cerraron para evitar la sangría que Pirsic estaba haciendo en sus interiores. Con Gidden con cuatro faltas, llegaron los momentos más complicados para las visitantes, que no podían frenar a Zamarat y que en ataque esperaban algún milagro de Jordana y Chambers.

Al final no hubo tiempo para la remontada porque Girona supo enfriar el partido y parar el arrebato naranja, pero la parroquia zamorana se fue contenta a casa al haber peleado de tú a tú con el líder de la categoría.

El Zamarat le planta cara al líder (60-67)