El Zamora CF se estrena mañana, en el Ruta de la Plata, desde las 20:30 horas, ante el mismo equipo con el que comenzó el pasado año, el CD Guijuelo. La ilusión de la renovación de Alberto Prada, y la solidez defensiva del equipo en los encuentros de pretemporada, las dos patas sobre las que se apoya la afición para creer en el equipo.
Arranca el Zamora de la temporada 2014-2015, arranca un cuadro rojiblanco muy remozado, en el que continúan ocho hombres de la pasada campaña y en el que Roberto Aguirre ha tenido que peinar el mercado de fichajes para ajustarse al presupuesto de un club que sigue centrando sus objetivos en salvar lo económico.
Arranca un Zamora CF en construcción, puesto que muchos de los fichajes rojiblancos han llegado en las últimas fechas y no han podido acumular minutos de calidad, y al que le faltan todavía uno o dos hombres para cerrar el plantel de este año. Aguirre deberá salvar las primeras jornadas con el equipo aún en pañales, algo que ya le ha ocurrido en otras ocasiones, teniendo que esperar a los últimos fichajes de todas las temporadas.
La falta de gol ha sido el gran hándicap del plantel zamorano, sin ser capaz de marcar, hasta la fecha, un sólo gol en los partidos que ha disputado. Los jugadores de ataque, todos nuevos en el equipo rojiblanco a excepción de Aarón, todavía necesitan ensamblarse, aunque los primeros partidos han permitido ver algunos buenos detalles de Coque, Sergi Mut y Carlos de la Nava.
Lo que más satisfecho ha dejado al técnico zamorano ha sido la solidez defensiva que, desde los primeros encuentros, ya ha demostrado una defensa que, en muchos de los encuentros, ha estado formada por jugadores de la casa. Dani Mateos, Jesús Garretas, Carrillo, acompañados por Juan de la Nava, que no continuará con los rojiblancos, Victor Sobrino (que volverá al Salmantino) y en los últimos encuentros Carlos Branco, han sido los cuatro hombres que han formado la retaguardia.
Los rojiblancos buscarán comenzar con tres puntos ante un CD Guijuelo que mantiene el bloque pero pierde una de las grandes revelaciones de la temporada pasada: Rubén de la Barrera. Los chacineros, que ya jugaron el Memorial Agustín Villar, demuestran seguir en la misma línea que el pasado año, y serán uno de los outsiders al play-off.
