jueves. 25.04.2024

Los cigarros tradicionales no dejaban opción en cuanto a sabor se refería. Esto se acabó gracias a los cigarros electrónicos. Esta nueva tecnología funciona por medio de la expulsión de vapor que se produce mediante una solución llamada e-líquido.

Cosas curiosas sobre los e-líquidos

El cigarrillo electrónico contiene una pequeña batería que es capaz de calentar esta solución y producir, de esta forma, el vapor que simula el humo del tabaco. Lo más ventajoso de todo esto es que se puede escoger tanto el sabor del líquido, así como la cantidad de nicotina. Según cada fabricante se pueden encontrar e-liquids:

● Muy alta concentración: 24 mg de nicotina.
● Alta concentración: 16-18 mg de nicotina.
● Concentración media: 10-12 mg de nicotina.
● Baja concentración: 6-8 mg de nicotina.
● Libre de nicotina: 0 mg de nicotina.

Como se puede observar, esta gradación en cuanto a la cantidad permite a los fumadores seguir un proceso mediante el cual pueden ir reduciendo los niveles de nicotina hasta llegar a cero. Cada fumador tiene que experimentar con el grado de nicotina que mejor se adapta a sus propias necesidades.

El placer del sabor

Para aquellos que quieran experimentar la sensación de nuevos sabores mediante el vapeo, los cigarros electrónicos cuentan con líquidos con miles de sabores, incluyendo el del propio tabaco.

En este sentido, los más demandados son:

● Los sabores afrutados.
● Los sabores refrescantes como el de mente.
● Los sabores de ciertas bebidas.

Lo bueno de todo esto, es que el e-líquido permite a los vapeadores alternar el sabor de sus cigarros. Estas soluciones vienen en pequeños frascos individuales que se pueden usar de forma alterna, lo que permite a la mayoría de los fumadores olvidarse del cigarrillo tradicional, mucho más dañino para la salud.

Fumar sabe a mucho más que a tabaco