20 de enero de 2018, 15:25
La llegada de Motauros a la ciudad ha desbordado las previsiones y hasta los mejores amigos del hombre tienen derecho a disfrutar del mundo de la moto. Esta mañana nos encontrábamos con esta simpática imagen de un pastor alemán que no se pierde ni una concentración motera. Su espacio en la moto y su casco estaban previstos. La seguridad ante todo.