22 de enero de 2014, 9:33
Así, con todas las luces encendidas, estaba el Teatro Ramos Carrión anoche de madrugada, algo que se lleva produciendo varios días y que puede producir un gasto energía en un edificio que aún no se ha puesto en funcionamiento.
Si pasean por el casco antiguo de la ciudad a las 3 de la mañana se pueden llevar una sorpresa al llegar a la altura del teatro Ramos Carrión. Las luces del edificio se mantienen encendidas hasta bien entrada la madrugada lo que puede producir un consumo innecesario de luz y por tanto un aumento en la factura de este edificio.