jueves. 28.03.2024

Centenares de personas acompañan al "Mozo" de San Frontis en su traslado procesional a la Catedral.

El Nazareno de San Frontis ya ha cruzado el Duero para subir a la Catedral y abrir la puerta a una nueva Pasión en Zamora. Centenares de zamoranos han acompañado en su traslado procesional a la imagen desde su iglesia sanfrontina hasta el templo mayor de la ciudad, donde permanecerá hasta el próximo Martes Santo, cuando la Cofradía de Jesús del Vía Crucis lo devuelva a su barrio y a sus gentes.

Resonaba aun en las piedras de San Frontis el eco de los rezos cuando el Nazareno tomó la cruz para subir a la ciudad, fiel a su cita del Jueves de Pasión, con claveles rojos a sus pies. Puntual, a las ocho y media de la tarde, acompañado por los acordes del Himno Nacional, traspasaba las puertas del templo para declarar abierta una nueva Semana Santa que desembocará en la Resurrección el próximo 16 de abril.

Las esquilas del Barandales ya anuncian el tiempo de las procesiones, los días santos y mágicos que vive Zamora en la primera luna de la primavera. Un año más, la marcha "Nazareno de San Frontis" que compusiera Carlos Cerveró, interpretada esta tarde por la Banda Nacor Blanco, ha dejado el rastro junto al río Duero de los primeros acordes fúnebres que se sucederán en los próximos días por las calles.

Zamora se dispone a vivir ya sus días santos. Centenares de zamoranos han cruzado el puente para salirle al paso al Nazareno y acompañarlo hasta la Catedral, hoy a hombros de los vecinos del barrio, en una tarde primaveral que ha favorecido una masiva asistencia. Otros lo han esperado en la Cuesta de San Ildefonso y en la Plaza de Fray Diego de Deza, donde sus cargadores han descansado del esfuerzo de la subida mientras numerosos devotos aprovechaban el fondo para hacerse la primera foto del año, porque junto al Nazareno de San Frontis, el que el pueblo llama el "Mozo", empieza una nueva Semana Santa y todo se dispara y todo se acelera.

Tarde de fervor en torno al Nazareno pero también de alegría y reencuentros, de recibir a los que llegan, de esperar a quienes mañana mismo ya estarán en casa. Tarde de echar de menos a los que faltan y de enseñar a los que llegan a vivir la Pasión según el pueblo zamorano, tan distinta, tan dentro.

Con la noche ya cerrada, diez minutos antes de que el reloj marcase las once, el Nazareno de San Frontis accedía al templo mayor de la ciudad, donde permanecerá hasta el Martes Santo, cuando la Cofradía de Jesús del Vía Crucis lo acompañe en su camino de regreso al barrio, seguido por la Virgen de la Esperanza. Allí ha tenido lugar la proclamación del Evangelio que esceninficará Zamora en los próximos días por las calles.

Por su pie hoy Zamora ha entrado en una Pasión que ya late en las calles y en las casas, en las gentes, en los niños y en las propias calles de la ciudad que se transforman para ser el perfecto escenario de la Muerte y Resurrección de Cristo.

Ya estamos, ya es.

Galería de imágenes 

Fotos: Rafael Lorenzo

El Nazareno cruza el Duero para abrir una nueva Pasión en Zamora