viernes. 19.04.2024
Visita a la depuradora.

La alcaldesa de Zamora, Rosa Valdeón, y el concejal de Medio Ambiente, Feliciano Fernández, visitaron esta mañana la Estación de Tratamiento de Agua Potable (ETAP) de Zamora donde durante estos días se está llevando a cabo la renovación del carbono activo granular, una medida que permitirá mantener la calidad del agua y ahorrar costes en los procesos de tratamiento.

En concreto se están sustituyendo 100.000 kilos del carbono activo existente por otro de última generación (AQUASORB F-23) especial para el tratamiento de aguas destinadas al consumo humano que tienen un origen superficial, como la que se utiliza en Zamora proceden te del río Duero. Se trata de un carbón que es especialmente eficaz para la eliminación de olores y sabores tipo Geosmina (algas). El proceso de fabricación desarrolla una estructura porosa especial para la eliminación de cualquier materia orgánica disuelta, pesticidas y otros componentes disueltos cómo metales pesados del agua bruta.

La actuación que se está llevando a cabo supone una inversión de casi 400.000 euros y permite seguir avanzando en la mejora constante de la calidad de agua de consumo en la ciudad de Zamora muy superior a la que exige la legislación vigente en todos los parámetros. En sentido hay que recordar que desde el año 2007 vienen realizándose procesos de modernización y mejoras constantes en el tratamiento del agua, introduciéndose nuevos proceso de ozonización y filtración por carbón activo que elimina la mayor parte de los compuestos orgánicos y de las sustancias que producen el sabor y el olor del agua. El resultado ha sido una mejora sustancial en la calidad del agua que los zamoranos reciben en sus hogares.

Junto al tratamiento, se llevan a cabo numerosos controles a lo largo de todo el proceso, desde su origen en la naturaleza hasta su entrega en los hogares lo que permite que los zamoranos puedan beber y cocinar con el agua del grifo con absoluta tranquilidad. En este sentido, la empresa adjudicataria, Aquona, realiza análisis en continuo para detectar la presencia de microorganismos y productos químicos indeseables, y para controlar otras características como el olor, el color o el sabor. Se realiza, también en continuo, análisis del cloro residual del agua de consumo en diferentes puntos de la red de distribución, para garantizar la presencia de una dosis mínima de este componente, como garantía sanitaria adicional. Además realizan analíticas diarias y se revisan más de 53 parámetros para garantizar su máxima calidad y seguridad para el consumo humano.

Todo el proceso de tratamiento que se lleva a cabo en la potabilizadora está informatizado, lo que permite tener un control absoluto del mismo y garantizar que el agua llegue a los hogares zamoranos en las mejores condiciones, durante los 365 días. Existe además un control telemático de todo el sistema de abastecimiento de la ciudad que cuenta con cámaras de grabación en la ETAP, en el bombeo del río y en las bombas de elevación. Esto mejora la seguridad de las instalaciones y permite observar en cualquier momento su funcionamiento y el estado de la captación. Dispone también del denominado "Sistema de Intrusismo Operacional" que emite señales a un equipo GSM enviando las alarmas a una central, al teléfono de guardia y a los responsables de mantenimiento quienes visualizan las incidencias en sus terminales y actuar en consecuencia con una mayor rapidez y eficacia.

La ETAP de Zamora tiene en la actualidad una capacidad de tratamiento de 32.000 metros cúbicos diarios, muy por encima del consumo de la ciudad que se sitúa entono a los 20.000 metros cúbicos al día.

La depuradora mejora el tratamiento del agua para ahorrar costes