jueves. 28.03.2024

Vivir en un barrio VIVO

Vecinos, amigos, comerciantes y hosteleros se han unido en la campaña "Por un casco viejo VIVO", que recoge firmas contra la reordenación del tráfico en el casco antiguo, lo que supondría darle la puntilla a la zona, cuando lo que necesita es precisamente lo contrario.

El tema no es nuevo ni es achacable solo a la nueva reordenación del tráfico que propone el Ayuntamiento, que dejaría más aislados a los vecinos de la zona que debería ser la más viva por excelencia, ya que es donde se concentran los principales atractivos turísticos de la ciudad: su románico y sus museos. Zamora y sus instituciones han ido dejando morir poco a poco esta zona de la ciudad, la más bonita, mi barrio, a base de olvido, de quitar edificios y servicios que daban vida y atraían juventud como fueron en su día la Escuela de Artes y Oficios o la Escuela de Idiomas, por poner dos ejemplos.

A la ausencia de servicios municipales (el Ayuntamiento bien podría ubicar alguna Concejalía en el eje Plaza Mayor- Catedral, donde al único que te encuentras a partir de las ocho de la tarde es a Herminio Ramos esculpido en bronce) hay que añadir las continuas trabas que secularmente esta ciudad ha puesto a quienes han intentado abrir un negocio en la zona, tanto por parte de Patrimonio como por las demoras en las licencias, que han condicionado hasta casi dos años a quien ha apostado por la zona, o la ya nefasta ordenación del tráfico existente desde hace años. Y algo de esto sabemos quienes la padecemos, que damos más vueltas que una peonza al volante para poder acceder a nuestras viviendas.

Para darle vida al casco antiguo hay que buscar una solución consensuada que no deje en el aislamiento a los vecinos ni a los comerciantes y hosteleros. Hay que potenciar la zona de paseo sin renunciar al desarrollo normal de la circulación, al menos de los residentes; ayudar y animar a los emprendedores que quieran instalarse y facilitar el acceso a la zona de quienes nos visiten.

Una plataforma ciudadana en la que se integra numerosa gente joven ya ha dado el primer paso. Insuflarle vida al casco antiguo no puede ser tan difícil si hay voluntad de escuchar a quienes día a día viven y sobreviven en sus calles. Somos muchos los que vivimos en él, los que necesitamos esa vida para no pensar que vivimos en otro planeta cuando a partir de las ocho de la tarde solo nos encontramos a la estatua del bueno de Herminio por la calle.

Porque queremos vivir en un barrio VIVO.

Vivir en un barrio VIVO
Comentarios