viernes. 19.04.2024

El escultor zamorano Jose Luis Alonso Coomonte impartirá una conferencia con el título. "Las Artes y Los Oficios". Este acto servirá como conferencia inaugural del curso 2019- 2020 de la Escuela de Arte y Superior de Diseño de Zamora. El acto se celebrará este martes a las 12.30 en el salón de actos del colegio universitario de Zamora

Don Jose Luis Alonso Coomonte, además de un gran creador de una inventiva avasalladora es un gran conferenciante. Su vida ha sido una avalancha meteórica de creatividad. Aunque se instaló en Benavente nada mas licenciarse de Bellas Artes, donde abrió su forja y dio clases en el Colegio Virgen de la Vega. Pronto se le vino pequeño ese mundo. En 1960, con 27 años, recibe el encargo de realizar un ostensorio que se envía a la Bienal de Arte Sacro de Salzburgo. La obra que realiza José Luis Coomonte rompe todos los convencionalismo de lo que se entendía por arte sacro y aun hoy día sigue siendo rabiosamente moderna. Nuestro escultor consigue la medalla de oro. La victoria de Coomonte es presentada inmediatamente como un éxito de España, o cual implica una popularidad repentina y creciente. Sobre él se vuelca la atención de la crítica y los medios de comunicación. Su Ostensorio Eucarístico realizado en hierro forjado y engarces de piedra de cuarzo. Forma parte de los fondos del Museo Nacional Reina Sofía. Despues vendrá la II bienal de París en 1961 y la exposición en el Palacio de Bellas Artes de Bruselas

En 1962, juntamente con el pintor Kiko Argüello y el vidrierista Carlos Muñoz de Pablos funda el grupo Gremio 62. El nacimiento de este grupo supuso remover la estética religiosa, fue una bocanada de aire fresco en el anquilosado mundo del ornato eclesiástico. José Luis Coomonte es el responsable que la iglesia española abandonara su gusto ecléctico decimonónico y abrazara el arte moderno como camino de llegar a Diós. A lo largo de las décadas siguientes realiza numerosas exposiciones nacionales e internacionales. 1963 en Madrid; 1964 en La Haya y León; 1965 en Ruan, Nueva York, México y París.... y en 1963 regresa a Madrid, donde da clases en el Instituto Laboral de Atocha.

Coomonte abre taller en Madrid en Arganda del Rey y allí va a trabajar a un ritmo desenfrenado, utilizando todo tipo de materiales: hierro forjado, piedras en su estado natural, bronce, aluminio, madera, poliéster (Sera el primer escultor en España en trabajar el poliéster), etc. . Sus encargos le vienen, en buena parte, de las órdenes religiosas, de parroquias, de particulares procedentes de la burguesía media y, desde 1965, de las Cajas de Ahorros de muchas capitales de provincia; se acentúa, desde entonces, un proceso de integración de su obra en la arquitectura que siempre ha estado presente entre sus preocupaciones y que constituye uno de los puntos más atractivos de su trabajo.

Paralela a esta actividad discurre otra, en la que Coomonte, con entera libertad, recogiendo las sugestiones que le llegan de un medio cultural mucho más rico que el de los años cincuenta, va dando rienda suelta a sus «impulsos creadores». Surge así lo más importante de su obra como «escultor puro»; este aspecto, con sus «series», tan variadas y desconcertantes, más el giro inusitado que parece anunciarse con la exposición de máquinas inútiles en la galería «Kreisler Dos» de Madrid (diciembre 77-enero 78)

En 1983 José Luis es profesor de la Escuela de Bellas Artes y Oficios de Zamora instalada entonces en las dependencias de la antigua diputación provincial y en 1988 pasa a dar clases en la Facultad de Bellas Artes de la Universidad de Salamanca.

El tiempo impartirá justicia y cuando nuestro tiempo pase, la historia pondrá el nombre de Coomonte entre el de los grandes creadores del siglo XX y sin lugar a dudas como el único referente artístico en la ciudad de Zamora. Algún día vosotros que estáis ahí sentados diréis a vuestros nietos que un día estuvisteis oyendo hablar a Coomonte.

Y quiero acabar con una frase tuya que debería de estar escrita con letras de bronce en todas las escuelas y facultades de arte. "Cuando no hay cultura y se crea un vacío, ese lugar lo ocupa la vulgaridad .....y hay que dejar de ser vulgar. Hay que acercar a la sociedad al mundo del arte desde muy pequeños, por solo eso puede ayudar a no caer en la vulgaridad".

Coomonte ofrece la conferencia inaugural del curso 19/20 de la Escuela de Arte y...