miércoles. 24.04.2024

Si hay una gran dama del teatro español, esa es Concha Velasco. La actriz vallisoletana, que el pasado mes de noviembre cumplió 80 años, lleva más de medio siglo sobre las tablas, de las que recientemente ha anunciado que se retirará tras interpretar a Lucrecia Conti en El Funeral, obra que llega al Principal el próximo 20 de marzo.

La trayectoria de la intérprete es intachable, y son muchos los que la han calificado como una mujer todoterreno, no sin razón. Con apenas 20 años, Concha Velasco ya había participado en producciones cinematográficas, teatrales y televisivas, siendo su consagración como actriz con su papel de Paloma en Las chicas de la Cruz Roja (1958). A pesar de que su formación no estaba dirigida a la interpretación sino a la danza -estudió más de una década danza clásica y española en el Conservatorio Nacional-, pronto ganó reconocimiento en la pequeña y gran pantalla, convirtiéndose en uno de los rostros habituales del cine español. Su popularidad fue en aumento y se valió de ella para lanzar un mensaje progresista en cada intervención pública que hacía. De hecho, en la década de los 80 fue una de las primeras actrices en denunciar el acoso que sufrían las mujeres en la industria. Lo hizo en una entrevista para un programa de TVE, aunque en aquel momento lo que más tarde pasaría a convertirse en el movimiento MeToo ni sorprendió ni indignó, tan solo provocó las carcajadas del público. Y es que Concha Velasco siempre fue una adelantada a su tiempo, y aunque puede que la chica yé-yé no predijera el avance de la inteligencia artificial en todos los ámbitos, séptimo arte incluido, la aparición de nuevos géneros narrativos o la irrupción de las plataformas de vídeo bajo demanda que han modificado por completo el modo de consumir productos audiovisuales, lo que sí sabía es que aquella era una burbuja que terminaría por explotar.

Del mismo modo, la intérprete sabe, o intuye, que su carrera está a punto de poner el punto y final. No lo hará, eso sí, de un modo convencional, ya que la obra con la que llega a Zamora es, sin duda alguna, un relato que rezuma su propia historia. El Funeral, que supone la primera colaboración profesional de la actriz con su hijo Manuel, gira alrededor de la historia de Lucrecia Conti, una de las más grandes actrices que ha tenido España. Tras su muerte, el Ministerio de Cultura decide rendirle el homenaje que la gran diva de las artes se merece y celebrar su funeral sobre las tablas de un teatro, lugar en el que la actriz pasó buena parte de su vida. Las nietas de Conti, interpretadas por Irene Gamell e Irene Soler, son las encargadas de recibir las muestras de cariño de cientos de fans y seguidores, contando para ello con la ayuda de un pariente lejano, en cuya piel se pone Emmanuel Medina. No obstante, todo da un giro inesperado cuando el fantasma de la actriz aparece en medio del escenario para saldar, siempre con público delante, algunas cuestiones que no logró solucionar en vida, y que van desde problemas con su representante, interpretado en la obra por Pepe Ocio, a sopesar una oferta para crear una figura de cera de sí misma. Todo ello acompañado del interés de los medios de comunicación ante el suceso, los cuales aparecen representados en la obra mediante clips de vídeo y aportan dinamismo a un guion que derrocha humor.

Así es como a lo largo de 90 minutos, Concha Velasco se transforma en Lucrecia Conti, un personaje que parece haber sido escrito exclusivamente para ella, como si en realidad Velasco estuviera interpretando a su propio álter ego en la obra. Muchos son los que ven en El Funeral una despedida de la propia actriz, una representación que iría en la línea del último documental que Agnès Varda filmó antes de su muerte, un adiós con antelación. La propia actriz llegó a reconocer en una entrevista al diario La Vanguardia que no le teme a la muerte y que ya ha cumplido con su sueño de ser actriz, abuela y, ahora, también fantasma.

Por el momento, lo que parece claro es que a la vallisoletana le sobran ganas y proyectos para seguir al pie del cañón. En Zamora podremos disfrutar de su maestría sobre las tablas el próximo 20 de marzo a las 20:30h en el Teatro Principal. Al escribir estas líneas las localizaciones todavía disponibles para su venta eran escasas, por lo que todo apunta que Concha Velasco volverá a conseguir un lleno a su paso por la ciudad.

Concha Velasco recala en Zamora para presentar su obra El Funeral