El Zamarat puede respirar un poco más después de ganar a domicilio en Sant Adriá, en un partido que le acabó costando el puesto al entrenador de las catalanas. En esta ocasión, el equipo zamorano tiene en casa una oportunidad de oro ante un recién ascendido, el Valencia, que ha hecho una gran temporada hasta ahora, ocupando el quinto puesto.
Para Aleksandra Stanacev, es importante que el partido se juegue en el Ángel Nieto, "mejor que allí". La base ve al equipo mucho mejor después de los partidos de Salamanca, Gernika y Girona, en las que las naranjas tenían "muchas lesiones". El juego interior del Quesos el Pastor, para la serbia, "es muy bueno", y les da a oportunidades a jugadoras como ella de aprovechar el hueco para tirar, aunque "hay que meterlos".
Fran García, por su parte, ha sido comedido a la hora de hablar de la salvación, asegurando que la victoria del otro día "fue importante, pero no definitiva". "Sigo pensando que para no depender de nadie hay que ganar dos partidos más, con eso estaría prácticamente hecha". Aun así, reconoce la mejora de las naranjas, donde pone el punto de inflexión en el partido contra Girona y, en jugadoras, el fichaje de Vinoise Pierre-Louis. "La llegada de Vivi nos ha dado mucho más al equipo, sobre todo en el aspecto interior. Tenemos más equilibrio".
Mirando al futuro más cercano, el partido contra Valencia, el míster lo ve como "un equipo muy duro, con diez jugadoras de muy buen nivel", poniendo especial atención en la alero María Pina y en la base Anna Gómez, "una de las mejores de la liga". Para conseguir un buen resultado, el Zamarat tiene que estar "al 100%, como en Sant Adriá".
