El pívot se hizo daño en la sesión de ayer y hasta el último momento el cuerpo técnico no decidirá si puede jugar en Salamanca. El Inec Queso Zamorano se enfrenta mañana (20.30 horas) a un rival directo por el play-off. En la ida, los de
Isidro Álvarez fueron muy superiores y ganaron por 20 puntos (58-78).
Imprevisto en el momento menos oportuno. El Inec Queso Zamorano no sabrá hasta el último instante si mañana, ante el Aquimisa CB Tormes (20.30 horas), podrá disponer de Evan Yates, el gran referente del equipo en la pintura. El estadounidense sufrió en el entrenamiento de ayer un esguince en el tobillo que deja en el aire su concurso ante el que es uno de los mejores equipos de la Liga y uno de los serios aspirantes a jugar el play-off de ascenso.
"El equipo entrena bien, cada día progresamos y no hay motivos para ser pesimista. El partido, en cualquier caso, será complicado, ellos solo han perdido un partido en su campo y son un equipo de arriba", aclara el técnico Saulo Hernández.
Los salmantinos se llevaron el encuentro de ida, en el Ángel Nieto, por 20 puntos de ventaja (58-78), si bien el Inec Queso Zamorano ha ido a más después de aquel comienzo de Liga. En el conjunto charro, el principal movimiento respecto a la primera vuelta fue la marcha del base Arturo Cruz, al que se sustituyó por el internacional jordano Imad Qahwash.
Sobre la relevancia de ganar o perder mañana, Hernández señala que "decisivo no es ningún caso, después quedan ocho jornadas con muchos partidos importantes, pero qué duda cabe de que cada jornada que pasa los partidos son más importantes, sobre todo ante rivales directos". Las armas de los zamoranos serán imponer un ritmo alto, evitar pérdidas de balón y mantener el nivel defensivo ofrecido desde que arrancó la Liga.
