sábado. 20.04.2024

La mitad de los asistentes de la asamblea del club decidieron irse del Colegio universitario ante los intentos de la directiva de dilatar una votación que nunca llegó a producirse y en la que se votó por un híbrido con el cual la directiva conseguía salvar su escudo inventado a inicios de la actual campaña.

La asamblea rojiblanca se enquistó en el punto del cambio de escudo, porque así lo quiso una directiva que trató, por todos los medios, de conseguir que fuera su escudo el que eligiera la asamblea.

Primero fue Segimundo Ferrero, que en su alocución como presidente dedicó más tiempo a hablar de la renovación estilística del escudo, que a otros temas más importantes de la actualidad rojiblanca, y después Ricardo Herrero, quien con una serie de diapositivas recalcó los fallos de imagen del Zamora CF, y todas las deficiencias del actual escudo rojiblanco, aunque, algunas de esas deficiencias las comparte con el escudo que la directiva se sacó de la manga a principio de temporada.

La directiva mantuvo, durante casi una hora, el punto de la votación del escudo, al tiempo que muchos de los asistentes, prácticamente la mitad, iban abandonando el salón, algunos de ellos como Avelino, socio número uno, que igual que alabó la claridad en las cuentas, criticó mucho la idea del nuevo escudo.

Tras muchos minutos de desoir las propuestas de los socios, algunos de ellos pidiendo el escudo de 2001, que subsanaba varios de los problemas que tenía el actual escudo, finalmente se produjo la votación entre tres propuestas: unos supuestos escudos originales del Zamora, el escudo actual que diseñó Germán Díez Costa cuando se fundó el club y que hasta la fecha nunca se había cambiado a excepción de mínimas modificaciones, o el actual que decidió crear esta directiva.

Cuando se inició la votación, nadie votó por los supuestos escudos originales, y, como se puede observar en la fotografía, la gran mayoría votó por mantener el escudo histórico del club. Sin que se acabara la votación, la directiva dio marcha atrás y volvió a dar vueltas sobre el tema del escudo, invalidando la votación que se había efectuado, y explicando que las modificaciones que se podían hacer eran el actual escudo.

Ante la negativa de la asamblea a aceptar el nuevo escudo, se volvió a entrar en una discusión en la que la asamblea iba por un lado y la directiva por otro, hasta que los directivos consiguieron que, con algunas modificaciones como cambiar ZCF por Zamora CF, introducir la corona dentro del balón y poner el río de color azul, fuera el escudo inventado por la directiva el que se aprobara, aunque sin votación de la asamblea.

La asamblea vota mantener el escudo del club pero la directiva consigue sacar un híbrido