viernes. 19.04.2024
Retirada del andamio del número cinco de Víctro Gallego.

En su momento su diseño fue calificado de "vanguardista" y con el paso del tiempo más que un andamio de obra pareció una obra de arte de dudoso gusto, por salirse de los cánones establecidos y cumplir únicamente una función decorativa. Ahora, tras casi cinco años formando parte de la fisonomía de la confluencia entre Víctor Gallego y Tres Cruces, el andamio del número cinco de la avenida Víctor Gallego comienza a desmontarse.

Concebido inicialmente para la construcción de un edificio de 19 viviendas que iba a conservar la fachada original del anterior inmueble, el andamio nunca llegó a tener uso y las casetas de obra, colocadas en altura de forma novedosa en Zamora, nunca llegaron a poner a prueba el vértigo de ningún trabajador de la construcción. Durante el lustro que formaron parte del paisaje urbano de la zona de las Tres Cruces, las casetas situadas a la altura del segundo y el tercer piso del inmueble permanecieron cerradas a la espera de que llegaran mejores momentos para el sector inmobiliario que garantizaran la viabilidad del proyecto de construcción.

Los años pasaban y las obras no comenzaban. El voluminoso andamio que al principio causó admiración pasó a representar un fastidio para los viandantes y vecinos de la zona, que veían cómo se mantenía una estructura que estrechaba el paso de los peatones sin justificación alguna, ya que las obras no se iniciaban. Las licencias y permisos caducaron y las reclamaciones para que se quitara el andamio llegaron a las instancias políticas. El año 2012 fue clave ya que en octubre el Ayuntamiento ordenó la retirada del andamio tras las denuncias hechas públicas entre otros por el grupo municipal de Izquierda Unida. En diciembre de ese año el Consistorio da un paso más al declarar caducada la licencia de obra.

Pero la empresa hace oidos sordos a los requerimientos municipales para que quitara el andamiaje, por lo que en marzo de este año el Ayuntamiento le da un ultimatum, aunque ha habido que esperar siete meses más para que, por fin, esta mañana se iniciaran los trabajos para desmontar la estructura.

Con motivo de los trabajos de desmontaje ha permanecido cortado al tráfico un pequeño tramo de calle y la Policía Municipal ha regulado la circulación de vehículos en la zona. Una última molestia que se dará por buena cuando la calle quede despejada al darse el adiós definitivo al vanguardista andamio de Víctor Gallego.

Adiós al vanguardista andamio sin obra de Víctor Gallego