Un 23 de febrero pero de 1981, la democracia española vivió su prueba más difícil, hoy gracias al estado de derecho y a que muchos pusieron cabeza a una situación de descontrol militar y a una trama política de la que se sigue elucubrando vivimos en libertad y democracia.
Militares afines y del antiguo régimen franquista protagonizaron un intento de golpe de Estado que pudo haber acabado en una nueva dictadura. Hoy a las 19:30 horas hará 38 años de aquel "Quieto todo el mundo, se sienten coño" menos mal que España volvió a decir si a la democracia y no a la dictadura. #23F
El resultado final de aquel golpe de estado, fue la consolidación definitiva del sistema democrático español, el intento golpista no fue un hecho del todo inesperado para muchos ya que el amplio malestar existente en sectores del Ejército por los cambios políticos emprendidos tras la muerte del Caudillo Franco habían dejado un vacío que intentaron llenar a golpe de pistola.
El forcejeo de Tejero con el general Gutiérrez Mellado (vicepresidente del Gobierno de España) y los posteriores disparos al techo realizados por Tejero no presagiaban nada bueno, ni dentro ni fuera del hemiciclo, pero la cordura prevaleció y aunque aún hoy en día hay quein piensa que aquello hubiera sido mejor, el caso es que la democracia y el sentido común volvieron a dar a España una nueva oportunidad de ser lo que es.
Solo permanecieron en su asiento, desafiando la orden de tirarse al suelo, el propio Gutiérrez Mellado, el presidente del Gobierno de España en aquel entonces Adolfo Suárez y el dirigente comunista Santiago Carrillo. Diputados y senadores, quedaban secuestrados en el edificio más representativo de la soberanía española durante horas, dejando al país entero con el corazón en un puño, mientras las noticias de lo que ocurría se conocían a cuenta gotas, las radios y la televisión mantuvieron informados a todos los españoles que esperaban el desenlace.
Muchos de los lectores de este diario no lo vivieron en primera persona, muchos ni habían nacido, hoy 38 años después es un día de celebración y de reconocimiento al estado de derecho, a la libertad y a la democracia. ¿Recuerdan donde estaban aquel 23F?
Yo lo sufrí con mi abuelo, Brigada de la Guardia Civil. Le acompañé a la Comandancia, el venía a buscarme a las clases de Judo y tras despedirse con un "cuida de la abuela y tranquilo que no va a pasar nada", no lo volví a ver hasta el día siguiente. Una noche en vela y mucho que contar sintiendo que volvía a vivir en el cuartel, en aquel cuartel de Torreperogil en Jaén. Marcado por aquello que se hacía eterno que era no tener cerca al que fue una de las personas que más me enseñó en la vida sobre eso, sobre la vida. Nunca lo olvidaré ...Una noche en la que la radio y la tele no dejaron dormir a miles de españoles, muchos rezaban ( mi abuela Maruja no dejó el Rosario en toda la noche) y otros muchos sufrían sin sus seres queridos cerca pensando en lo peor. Que nunca más tenga nadie que vivir esa situación es lo único que hoy en día puedo desear.
Las urnas darán sus resultados y el ser tolerante y utilizar el sentido común la premisa, las armas y el imponer la razón por la fuerza están fuera de todo sentido. Que así sea.
