viernes. 29.03.2024

¿Estás pensando en mudarte o simplemente quieres cambiarla la cara a tu casa luego de algún tiempo? Entonces no hay mejor opción que apostar por algunos sencillos trucos de decoración que no sólo te permitan descubrir una nueva relación con tu vivienda, sino también ahorrar dinero.

Y aunque sabemos que muchas veces la decoración de casas contempla gastos inesperados, lo cierto es que existen varios secretos que deberías tener en cuenta en tales circunstancias, con los que indudablemente vas a reducir tus erogaciones, guardando dinero para otros momentos.

Lo primero que tienes que tener en cuenta entonces es que, antes de comenzar con el proceso de decorar tu nuevo hogar o el que quieras restaurar, es necesario tomarse un tiempo para realizar una planificación, destinando la mayor parte del presupuesto a esos aspectos que crees primordiales.

Siguiendo un estilo en común y revisando entre las últimas tendencias en complementos y accesorios que hay en el mercado, notarás que ciertas tiendas cuentan con mejores precios que otras en segmentos en particular. Revisar sus catálogos te dará un panorama más claro al respecto.

Si quieres o tienes la necesidad de pintar, antes que nada, deberías echar un vistazo a garaje o el galpón a ver si no te ha quedado pintura de otra ocasión. Eso no te obliga a pintar toda la casa de este color, pero puedes usarla para una pared, complementando luego con blanco, una moda que viene creciendo en los últimos años, y queda muy bonita.

Por otro lado, no debes descartar de ninguna manera los materiales vinílicos o de PVC, que todo el tiempo se están renovando para responder a la demanda de consumidores que buscan viviendas que luzcan bien, pero sin tener que gastar tanto dinero de una sola vez.

La ventaja de estas alternativas, además de que suelen ser más económicas que otros materiales que utilizan nuestros padres y abuelos, es que su instalación se realiza por placas o en grandes tramos, reduciendo la factura por colocación, un gasto muchas veces inesperado pero importante.

A veces, si quieres decorar un ambiente, no hace falta comprar nuevos muebles y pintar cada uno de sus muros, sino que puedes conseguir que luzca completamente distinto con sólo agregarle algunos cuadros, unas láminas, o un par de vinilos sobre una de las esquinas.

Y no se trata de decoración únicamente. Por ejemplo, en la cocina puedes colgar una pizarra que vista una pared desnuda, pero en la cual también escribir la receta que prepararás esta noche, los alimentos que hacen falta para la nevera, o un mensaje optimista para ver cada mañana.

De igual modo, podemos obtener un efecto de renovación total mediante una pequeña inversión si nos concentramos en los textiles de cada uno de los cuartos de la casa, sobre todo cuando han pasado varios años desde su última actualización.

Cambiando la alfombra del salón, los cojines del sillón o las sábanas de tu cama verás inmediatamente una serie de ambientes renovados.

Trucos para ahorrar dinero en la decoración de tu hogar