viernes. 29.03.2024

La lluvia apareció hoy en Zamora, después de muchos meses sin hacerlo con intensidad, lo que ha aliviado la enfermedad a los alérgicos y ha ayudado a un campo que tiene pocas esperanzas en los cultivos de este año.

La lluvia llegó como agua de mayo, y nunca mejor dicho, porque a los campos zamoranos cada día que pasaba sin llover era un día menos de esperanza a agricultores, era un día más de incendios en los montes zamoranos.

Durante el pasado fin de semana se registraron los primeros pequeños incendios en la zona de Benavente, unos fuegos que hacían presagiar un verano duro sin la aprición de la lluvia, con una vegetación menos verde de lo normal para esta fecha. Aunque en los últimos días había caido algo de lluvia, no ha sido hasta esta tarde cuando, por el plazo de una hora, en la capital ha descargado con fuerza la lluvia.

Pero el problema del campo iba mucho más allá, y es que los agricultores están viviendo uno de los años más secos de la última centuria, lo que les está llevando a perder gran parte de sus cosechas. El trigo, acechado por la sequía y por la "roya amarilla", está prácticamente perdido en varias comarcas de la provincia, y muchos agricultores creen que podrán perder cerca del 30% de su cosecha. Aunque la "roya amarilla" siempre ha existido, esta última cepa del virus se ha resistente a los fungicidas y ha asolado las cosechas de gran parte de la comunidad.

Alergia

Quienes también han agradecido esta lluvia son los alérgicos, ya que una lluvia fuerte ayuda a mejorar los niveles de contaminación. Esta primavera, que se había calificado como una primavera suave para los alérgicos, se ha visto agravada por la falta de lluvia en las últimas semanas, por lo que las sensaciones han mejorado en las últimas horas.

La época de germinación de las gramíneas, responsables del 80% de las alergias, es de octubre a marzo, por lo que si llueve en esos meses el polen alcanza unos niveles elevados. Por el contrario, a partir de abril, cuando se inicia la polinización de estas plantas, la lluvia es beneficiosa, ya que provoca un efecto de limpieza atmosférica, elimina los pólenes del ambiente, baja su concentración y mejoran los pacientes.

Zamora ha recibido hoy la lluvia con alegría, con satisfacción, como agua de mayo.

Como agua de mayo