Como en El amanecer de los muertos o Resident Evil, los zombis tomaron anoche la Plaza Mayor y los bares de los alrededores para disfrutar de una luna casi nueva salpicada de sangre y ambiente tétrico.
Los zamoranos echaron mano de la imaginación para hacer su propio 'remake' de los clásicos de las películas de muertos vivientes. Pero no sólo los que regresan a la vida en estado cataléptico fueron protagonistas de la noche de Halloween, también se pudieron ver otros personajes típicos de la madrugada del primero de noviembre, desde el hombre de la guadaña y las damas del siglo XVIII absorbidas por los vampiros hasta góticos con bolso en forma de ataud o enfermeras subiditas de tono con muchos glóbulos rojos por repartir.
En los bares de Los Herreros, los pubs de la Plaza Mayor y los garitos de La Marina la decoración de ultratumba llegó a todos los establecimientos y no faltaron telas de araña, calaveras, máscaras de batman o ambientación temática, como la inspirada en la celebración de la Santa Muerte mexicana del Tribal o la recreación de Los chicos del maíz del Illusion, por poner dos ejemplos. Entre los que disfrutaron de la noche más fúnebre del año se pudieron ver también grupos disfrazados de los personajes de series 'halloweenianas' como The walking dead. Pero sin duda, el mayor protagonismo de la velada fue para las calabazas, que acompañaron a los zombis toda la noche, hasta que volvió a hacerse de día y los muertes vivientes regresaron a los cementerios.
