Ya están aquí, hermanos, hijos, nietos, sobrinos y demás familiares que este año en mayor o menor medida vuelven a casa por agosto. Las localidades cercanas a Zamora que anoche ya tuvieron a sus visitantes como pernoctadores hacían esta mañana de ciudad dormitorio para lo que se avecinaba en los centros comerciales de la capital, especialmente Carrefour en el CCValderaduey y los Mercadona de Poligono de la Hiniesta y Candelaria.
Han vuelto en masa pero menos masa, porque al final muchos han escalonado los viajes y estarán una tímida semana en playa y el grueso de las vacaciones viendo a familiares con esperemos mucha cautela, y teniendo en cuenta que los contactos han de ser con toda la seguridad del mundo. 12 contagios más ayer y comprobados por PCR aunque se teme dentro del ámbito sanitario que sean muchos más. La mezcla y la vuelta a la casa del pueblo es lo que tiene.
Entre tanto Carrefour se proveía esta mañana y en la tarde de ayer de personal de guardia para solventar excesos de aforo, que en ningún momento se ha llegado a dar, pero si un flujo muy importante de clientes y de compradores ávidos de llenar neveras en casas de pueblo y campo, para poder así disfrutar del asueto merecido tras la pandemia que ha tenido en casa más de tres meses a millones de españoles.
La operación salida no ha sido lo que otros años con caídas de hasta un 25% de conductores menos este 2020, al menos en Castilla y León, pero lo que está claro es que Zamora está de nuevo plagada de vascos, madrileños y visitantes de otras provincias todos ellos con mascarilla y con muchas ganas de volver a disfrutar de las playas fluviales de nuestra provincia. También de las compras y de los bares y restaurantes que ya se han aprovisionado aunque haya sido en menor medida que en años pasados.
Bienvenidos a todos, pero extremen sus medidas de prevención anti COVID-19 Zamora es una de las provincias sin brotes de toda España, no le suban la media por imprudentes. Ademas esta noche a las 2 ya saben, toque de queda y ocio nocturno cerrado. Volverán los viejos tiempos o tendremos que reinventar el ocio nocturno....que sabe nadie.
