El Club Naútico de Sayago Santa Marina, creado en noviembre de 2003 por una serie de sayagueses y cuyo fin principal fue la creación de un espacio lúdico de embalsamiento en la ribera de Los Molinos de Bermillo de Sayago para uso como zona de baño y al mismo tiempo, en su reflujo, como abrevadero para el ganado, ha tenido en este mes de mayo de 2020 y en plena pandemia del COVID-19 un gesto de esos que te hacen creer en la solidaridad de la sociedad.
Abandonado el proyecto inicial embalsamiento luego de tener confeccionado el proyecto técnico del mismo y solicitadas las autorizaciones a Confederación Hidrográfica del Duero, los fondos obtenidos de los 14 socios y de las subvenciones nominativas que se obtuvieron quedó en un remanente de dinero.
A finales de abril pasado dos de sus socios tienen la idea que han llevado a la práctica con el respaldo de la mayoría de sus socios y compañeros, de que la mejor manera de gastar ese dinero era ayudar en esta situación que estamos viviendo con la COVID-19 a aquellas necesidades que se pudieran estar dando en Sayago por esta causa.
Así, conscientes de las reiteradas reclamaciones de los sanitarios por la falta de medios de prevención en su trabajo, se ponen en contacto con el coordinador médico del la Zona Básica de Salud de Sayago y le ofrecen esa ayuda. Desde esta coordinación se ponen en contacto con un profesional de la distribución sanitaria y fruto de ello en la primera semana de mayo se le dona al centro de salud de Sayago, para sus 17 médicos y 16 enfermeros, material quirúgico oficial, aprobado y específico para su uso sanitario consistente entre otras cosas en dos termómetros de infrarrojos, 30 batas quirúrgicas, un EPI completo, un buzo quirúrgico, guantes de los empleados en cirugía y mascarillas y caretas profesionales, entre otras más cosas.
Con ello se pretende que los sanitarios, primera línea de fuego en esta pandemia, estén mejor protegidos y puedan realizar su trabajo tan necesario, con más seguridad para intentar no ser contagiados y sobre todo no ser transmisores de contagios en el desarrollo de su actividad sanitaria.
En una segunda fase el Club tiene intención de seguir aportando fondos para otros colectivos necesitados y siempre bajo la supervisión de profesionales de la sanidad y de los servicios sociales al objeto de que lo que se haga, aún de una forma modesta como lo es el club y sus socios, de verdad sea efectivo.
