La ciudad de Toro padece de una deficiente iluminación de sus calles y monumentos y carece de un sistema elevador seguro para la sustitución de bombillas en luminarias altas.
En el casco urbano existen más de 300 farolas sin servicio por falta de bombillas o por su deterioro y los semáforos necesitan urgente reparación.
Las quejas vecinales llevan demasiado tiempo sin ser atendidas por el alcalde y está provocando un creciente malestar ciudadano
Los socialistas toresanos vienen denunciando desde hace más de dos años la existencia de un parque de la ciudad – La Magdalena- sin ninguna iluminación. De las nueve farolas de que dispone no funciona ninguna de ellas, habiendo desaparecido el cableado e incluso algunas farolas. Sin embargo, las críticas de la oposición de momento de nada han servido y el referido parque sigue a oscuras.
Pero a esta lamentable situación se añaden ahora las quejas vecinales, cada vez más furibundas, porque se sienten engañados por el alcalde y su equipo de gobierno, que prometen que se ocuparan de ello pero nada hacen.
Solo a modo de ejemplo, los socialistas mencionan que en la Avenida Carlos Pinilla hay más de 25 farolas altas sin servicio en las que se ha separado el mecanismo que sujeta la bombilla a la propia farola. En la Cuesta Cavila y Carretera de la Estación también hay este tipo de farolas sin servicio desde hace bastante tiempo.
Es preocupante que las farolas con mástil de gran tamaño en calles y avenidas de toda la ciudad llevan más de dos años sin reparación o sustitución de bombillas por falta de un mecanismo elevador seguro que garantice la seguridad de los operarios municipales. Por ello, el PSOE DE TORO PROPONE el alquiler de maquinaria elevadora para su utilización esporádica cuando sea necesaria.
A estas deficiencias generalizadas cabe añadir otras como en el Barrio de Tagarabuena, donde existen zonas con graves deficiencias de iluminación. Junto a las conocidas como "casas de los maestros" se ha visto una farola destrozada de forma un tanto extraña sin que se haya identificado al autor.
La situación del nuevo Paseo del Espolón es muy lamentable porque ninguna de las luminarias funciona, sin que el Ayuntamiento haya solucionado el problema después de todo el tiempo que ha transcurrido.
Por otra parte, resulta muy preocupante que los semáforos Toro permanezcan desde hace mucho tiempo sin funcionar correctamente por un mantenimiento defectuoso o inexistente, situación que puede provocar accidentes de tráfico con daños para las personas.
Por todo ello, los concejales socialistas de Toro proponen al alcalde que se ocupe de inmediato de la deficiente iluminación de toda la ciudad, en la que existen más de 300 luminarias sin servicio, que ofrecen un aspecto triste y abandonado de la ciudad, así como de retirar las antiguas farolas, inutilizadas, de la Avenida Carlos Pinilla.
Esta situación hace que Toro sea cada día una ciudad más abandonada por el alcalde y su equipo de gobierno, y al problema de la limpieza de las calles y recogida de basura se añade el de iluminación. En definitiva, es triste reconocerlo, pero Toro es una ciudad abandonada, sucia y carente de la adecuada iluminación.
