martes. 16.04.2024

El toque de queda que entró en vigor a las diez de la noche ha dejado a Zamora en silencio. Las calles de la capital aparecen solitarias y vacías. Solamente la presencia de algunos policías en determinados puntos de la ciudad nos recuerda que en la ciudad del románico aún vive gente.

El coronavirus se ha alzado como un enemigo letal que ha encerrado la vida de los zamoranos en sus casas. No hay gente charlando en las terrazas, ni compartiendo copa de vino en las barras de los bares. Los Herreros ya no tienen vida. Santa Clara ya no es la arteria principal de la ciudad porque es solamente una calle sin bullicio, vacía y en silencio.

Ya no hay paseos nocturnos para ver la catedral iluminada ni el jaleo ronda la Plaza de la Marina.

El panorama es desolador y el silencio impacta. Zamora es una ciudad amenazada por un enemigo invisible, que nos encierra en casa y nos aleja de la familia y los amigos.

Ni siquiera los más jóvenes se han atrevido a desafiar las órdenes. Toca quedarse en casa desde las 22 horas hasta las 6 de la mañana. Alguien comentaba a propósito del toque de queda: "¡Ya estamos todos en la mili!". Toca obedecer y cuidarse.

 

 

Esta noche los cuerpos de seguridad del estado han informado a los peatones y a los conductores del inicio del toque de queda una medidas dictada desde la Junta de Castilla y León y que tendremos durante 14 días. El domingo en el Consejo de Ministros especial que ha convocado Pedro Sánchez se dictaminará el Estado de Alarma para las Comunidades que lo han solicitado y así ver amparadas las medidas anti covid-19.

La Guardia Civil ha controlado los accesos a la capital tanto en el Corredor de Roales con varias patrullas que bajo el mando del Capitán Jefe del a Compañía de Zamora y la Sargento Comandante de puesto de Zamora y varios agentes han informado de la instauración del toque de queda en la capital y la provincia, también varias patrullas de la USECIC hacían lo mismo en la rotonda del Cristo de Morales.

 

En el interior era la Policía Nacional la que en la plaza de Alemania mantenía un control y posteriormente patrullaban con varias unidades por la ciudad, también la Policía Municipal se reunía en la Marina a las 10 de la noche y posteriormente iniciaban el patrullaje de información por toda la ciudad.

Una noche sin incidentes en la que Zamora ha mantenido el tipo y se ha quedado en casa a partir de las 22:00. El civismo ha sido modélico y salvo algún despistado todo ha sido una verdadera muestra de urbanidad y de responsabilidad, esperemos que durante los 13 días que restan se mantenga esta máxima.

Galería de imágenes ( Marcos Vicente) 

Toque de queda: El silencio se cierne sobre Zamora