Carta abierta de la asociación Interior Legendario: Hablar del lobo siempre activa la polémica y pone en evidencia las posturas enfrentadas de ecologistas y ganaderos, como los polos opuestos de una misma realidad.
La existencia del lobo en la provincia de Zamora es un hecho de tal importancia, que moviliza inmediatamente, ya sea a favor o en contra, generalmente en base a ideas preconcebidas, miedos atávicos e intereses particulares que tendemos a defender, sin tener en cuenta los otros puntos de vista.
La iniciativa empresarial iniciada bajo el nombre común de Interior Legendario, pretende huir de esos polos extremos, entender todas las sensibilidades y proponer una forma diferente de gestionar esta realidad, sin posicionarse en contra de nadie.
Tratamos simplemente de aceptar ese hecho, convivir con él y aprovechar su potencial como recurso turístico de interés internacional, capaz de generar el crecimiento económico tan necesario para el asentamiento de la población y que puede ser beneficioso para todos.
No estamos en contra de los ganaderos: entendemos que los daños ocasionados por el lobo deben ser evitados en la medida de lo posible y, siempre, debidamente compensados. Apoyamos al sector en sus demandas de mayor agilidad y eficacia en el pago de las indemnizaciones. Pero además, estamos convencidos de que esta nueva visión de la gestión del lobo, resultará también rentable para ellos, al poner en valor su trabajo, sus circunstancias, sus necesidades y, por encima de todo, sus productos, elaborados en un entorno especialmente duro y exigente, por la peculiaridad que supone la presencia de una especie emblemática, unida al hombre desde tiempo inmemorial.
Tenemos muchos ejemplos en el mundo de situaciones parecidas, que se han conseguido resolver sin dejar a nadie fuera del camino del desarrollo. El león en África, el tigre en India, el puma en América o el tiburón en Australia son los motores de una nueva economía que mueve millones de personas, genera ingresos y sostiene el crecimiento de zonas rurales alrededor del planeta.
Dentro de nuestras fronteras, el lince ibérico y el oso pardo son también referencias interesantes. En Zamora tenemos el lobo y dos posibilidades ante nosotros: acabar con él o empezar una nueva forma de gestionar su presencia, que aúne su pervivencia con la necesaria protección de la población local y sus intereses, que conserve los modos de vida tradicionales basados en la ganadería extensiva y, al mismo tiempo, que abra nuevas posibilidades empresariales para crear un entramado económico más rico y de mayor recorrido.
Interior Legendario no está en contra de nadie, sino a favor del lobo, de la ganadería, del medio rural, de la vida natural y del futuro.