Como si de un profesor que lo es, o maestro que también, o un pastor que por supuesto, se tratara, Jesús Campos, el cura de San Lorenzo se despide de su Parroquia y aunque seguro que ha llorado más estos días que en muchos años (duro de lágrima es...) intentaremos que lo haga una vez más pero con el orgullo de haber sido en el Barrio de los Bloques, amigo, padre, pastor, maestro, scout y profesor de muchos a los que se llama católicos y que saben tanto de la Santa Madre Iglesia.
Este año el campamento de Socuts se hice en Dueñas (Palencia), del 31 de julio al 11 de agosto, ambos inclusive y Chus, Don Jesús lo organizó todo de forma similar a otros años, pero desde el prisma scout a cuya organización castellano-leonesa pertenece el grupo de existe en la parroquia de San Lorenzo.
Este año el campamento estaba inspirado en los videojuegos, cada año se hace sobre una temática...y como si de un videojuego se tratara, Chus se despedía en un GAME OVER de la Parroquia y de sus Scouts el Día de la Familia que se hizo el domingo 11.
Al igual de años anteriores, sobre las once de la mañana comenzó la recepción de padres y familiares y antes de comer se celebró la misa acostumbrada, la diferencia respecto a otros años fue que durante la misma se impusieron pañoletas scouts a varios chicos y chicas que anteriormente habían llevado a cabo la formación y las pruebas de merecimiento. Como merecidos son los elogios a estos nuevos miembros scouts hay que reflexionar sobre la labor de Jesús Campos en estos 14 años de sacerdocio y amistad en un barrio obrero venido a menos en población pero a más en la Iglesia. El problema está en los proyectos inacabados y en la falta de justificación en los cambios, pero dicen los entrenadores de fútbol que "el sacrificado es el que menos culpa tiene" y no por que el equipo marche a la cola de la clasificación en la tabla, sino porque quizá donde va haga falta que se vuelvan a llenar las Iglesias. Imaginamos que esa haya sido la decisión de quien manda en esto de las Parroquias y cambios y que ojalá no se equivoque porque luego tendrá que hacer eso que los cristianos llaman acto de contrición y será San Pedro el de las llaves quien deje o no entrar en el ansiado cielo a los pecadores.
Tras el inciso y pequeña reflexión volvemos con el relato del campamento en Dueñas, después, a la hora de las ofrendas, los padres de los le entregaron un donativo con destino a Angola, a donde ahora mismo está de camino y va cargado como si se tratara de Papá Noel de regalos que harán mucho más felices a los que allí habitan, los hombres, mujeres y niños del llamado tercer mundo.
Las sorpresas para este cura de barrio no solo llegarán a Angola, también llegaron a ese campamento... una sorpresa que emocionó y que se produjo al final de la misa donde los padres le hicieron entrega de un regalo personal, para él, lágrimas en la cara de un duro Chus al que no se le había visto llorar casi nunca ....y las lágrimas las provocaron 14 años de sacerdocio en San Lorenzo, Un Hoffman tuvo la culpa imágenes de estos 14 años de vida parroquial... Esas imágenes recogían distintos momentos de su estancia con todos nosotros sus feligreses y amigos, convivencias, excursiones, comuniones, bautizos, confirmaciones, JMJ etc...LE ENCANTÓ Y LE EMOCIONÓ hasta el punto de no poder articular palabra y darnos las gracias gestualmente antes de reponerse un poco y, con voz entrecortada, terminar esa penúltima misa...
Y, como todos los Días de la Familia, la jornada terminó con una comida, una sobremesa, la recogida de bártulos y la vuelta a Zamora a media tarde...
Nos queda el amigo, el "Capitán oh mi capitán" de aquellos recuerdos del Club de los Poetas Muertos, el cura cercano que muchas parroquias y mandatarios de la iglesia desearían tener, también la labor que durante 14 años nos llenan de orgullo y satisfacción como diría el mérito monarca de ser y pertenecer a una parroquia en la que deja huella de solidaridad, de reivindicación y lucha tranquila y sincera ante la injusticia que mira tú por donde se ceba con su traslado, y por supuesto con su buen hacer con un innumerable grupo de personas a las que nos queda la impronta de un cincuentón de los del 69 de los que marcaron y marcarán filosofía de vida. Un hombre al que se le quiere y se le demuestra con hechos, con palabras, abrazos y sabiendo que en Angola, en Los Bloques, y por supuesto en Toro a donde dirigirá su labor cristiana se le esperará siempre.