Estremecido aún por la noticia del fallecimiento del que fuera mi compañero en SATE Fernando Jiménez, solo queda aferrarse a su recuerdo de felicidad y de sonrisa bonachona y por supuesto al saludo siempre cordial y amistoso de una gran persona.
Siendo muy joven lo conocí, siendo un niño. Corretee por SATE para ir a ver a mi padre cientos de veces, y siempre él tuvo una frase amable conmigo. Al final acabé trabajando codo con codo con una gran persona a la que nunca olvidaré, por la capacidad de trabajo, por espíritu de lucha, y sobre todo por su tesón. Fernando trabajó en la administración de la Sociedad Anónima de Tractores Españoles, Peugeot, y también compatibilizaba su trabajo como jugador y árbitro de balonmano. Con una gran afición al deporte, a su Cristo de la Buena Muerte y con toda la paciencia que da el ser contable, y con todo el cariño con el que trató a todos sus compañeros y amigos, siempre lo mantendré en mi memoria.
Fueron muchos años juntos en el trabajo, en aquel S.A.T.E, luego Hispanomición S.A. y posteriormente aquel enrarecido GAMAR Automoción, una batalla semi perdida ante tanto esfuerzo de los que fueron compañeros de años de trabajo, también y después, en la mesa de anotación de las tardes de Ángel Nieto, y con los chicos y chicas del Balonmano que hoy pierden un baluarte como amigo, persona y técnico en el arbitraje, aunque ya fuera en su última etapa también desde la mesa de anotación. Hoy solo se que cuando he leído en el Instagram del BM Zamora la noticia he llorado como un crío ... no éramos de salir juntos aunque comimos y cenamos unas cuantas veces a lo largo de esta vida, su entrañable figura y su sonrisa tras el bigote que le caracterizaba....hoy, se me vino a la cabeza e hizo enseguida una nueva rotura de corazón por la marcha de otro amigo y compañero.
También se me ha roto parte de vida y de los buenos recuerdos como le habrá pasado a su incasable compañero de mesa Pepe Barroso al que hoy, en el tanatorio, daré el abrazo de amigo que siempre he tenido para esta espectacular pareja que siempre pedían esa foto que inmortaliza a las grandes personas.
A toda su familia...os abrazo de corazón, a todos ellos y sobre todo a la incansable veladora del esfuerzo ante la lucha y batalla de la enfermedad, a su costilla, la que ha dado todo por el amor tras 36 años de matrimonio es de darle las gracias, por tanto y por todo.
Fernando compañero...te voy a echar de menos...y lo sabes. Toda la familia del Balonmano está de luto y todo SATE y los que te hemos conocido te echamos ya de menos.