El presidente de las personas mayores un zamorano de pro y con una mente lúcida y con una más que dilatada carrera de conocimiento humano reflexiona sobre lo que es la emigración y despoblación en Zamora y provincia, un tema recurrente al que en este caso le pone nombres y apellidos
EMIGRAR, CONSECUENCIA DESPOBLACIÓN
"En el, transcurso de mi dilatada vida pude comprobar cómo las gentes marchaban de la tierra que les vio nacer a otros lugares en los que vivieron y desarrollaron su porvenir. El motivo de su marcha siempre era el mismo, aquí no encontraban medios de subsistencia y la miseria amenazaba a él y a quienes de él dependían.
Claro que con ellos se llevaban el recuerdo de su tierruca y los deseos de volver en cuanto les fuera posible, pero el paso de los años ha venido a demostrar que fueron muchos más los que se marcharon y no volvieron que los que regresaron para quedarse en su patria chica.
La balanza demográfica se ha inclinado alarmantemente hacia la despoblación sin que pueda atisbarse un remedio ni a corto ni a largo plazo.
Yo nunca emigré, pero sí viajé y comprobé que las gentes hacen todo lo posible por permanecer en su tierra y aportan sus conocimientos, sus iniciativas, su trabajo y sus medios económicos para lograr el progreso de su entorno, esto es lo que hace producir un crecimiento que suele ocurrir con la llegada de los que vienen de fuera, no precisamente de los nativos.
La emigración es un movimiento de personas histórico, los romanos se esparcieron por Oriente y Occidente. En tiempos más recientes, Rosalía de Castro plasmaba en sus poemas la morriña del emigrante gallego que marchaba a tierras de América en busca de la fortuna que le negaba su terruña.
Personalmente, me apasiona leer en la lengua gallega los versos que Rosalía de Castro dedicó al hombre que se despedía de su Galicia cuando marchaba a tierras extrañas:
"Adiós ríos, adiós fontes,/ Adiós regatos pequenos/ Adiós vistas dos meus ollos/ Non sei cando nos veremos/ Miña terra, miña terra/ Terra donde me eu criei/ Hortiña que quero tanto/ Figueriñas que prantei/ Prados, ríos, arboredas/ Pinares que move o vento/ Paxariños piadores/ Casiña do meu contento/ Muiño dos castañares/ Noites craras do luar/ Campaniñas timbradoiras/ Da igresiña do lugar/ Amoriñas das silveiras/ Eu lle daba o meu amor/ Caminiños antre o millo/ Adiós para siempre, adiós¡/ Adiós groria, Adiós contento¡ / Deixo a casa onde nascí ¡/ Deixo a aldea que conoço/ Por un mundo que non vin ¡ / Deixo amigos por extraños".. . .
Balbino Lozano, 24 septiembre 2020
