Después de varios testimonios se puede confirmar que el turno nocturno en la Policía Nacional ha desaparecido los siete días de la semana. Desde las diez de la noche hasta las siete de la mañana del día siguiente la posibilidad de denuncia ante un suceso, siempre y cuando no sea violencia de género o un atentado contra la integridad de una persona identificada, será inexistente.
Cuando casi se va a cumplir un mes del 196 aniversario de la Policía Nacional, que se celebró el 14 de enero, podemos confirmar, tras varios testimonios, que el turno nocturno de denuncias en la comisaría ha desaparecido. Esto conlleva a que el único caso que atenderán será violencia de género, sin embargo, otros incidentes como robos tendrán que ser atendidos a partir de las siete de la mañana del día siguiente.
Tal y como explicaban en el aniversario de la Policía Nacional, Zamora es una de las ciudades más seguras en las que, en palabras del subdelegado del Gobierno, Ángel Blanco, "bajamos en casi todo tipo de delitos". Unas declaraciones que pueden perder validez si durante el turno nocturno hay algún tipo de problema que requiera una respuesta policial.
Una injusticia también para aquellos que trabajan con un horario de noche o que tienen su hora de salida a las 22:00 horas, momento en el que dejan de atender los incidentes. En caso de que un trabajador salga en la hora mencionada y sufra un percance, tendrá que tener relevancia y gravedad para que el cuerpo se movilice ante el suceso, si no, tendrá que esperar al día siguiente para poder presentar la pertinente denuncia. Podrá ser a partir de primera hora, en el momento de apertura, a partir de las 07:00 horas cuando se pueda realizar la acusación.
Una decisión muy cuestionable, en una ciudad que supuestamente presume de seguridad gracias a la Policía Nacional, que puede poner en duda la credibilidad de las cifras en materia de firmeza. ¿Se contabilizarán los incidentes incluso sin la posibilidad de denuncia?
La Zamora despoblada y sin repuesto en Policías Nacionales
Las vacantes para ocupar plazas y destino en Zamora serán cuatro o a lo sumo cinco, en este 2020, cuando los sindicatos solicitan una presencia de al menos 18 nuevos guardias para atender a la demanda por ratio de personas, a parte de poder recuperar las bajas que por jubilación dejan a la ciudad a la provincia con un número de policías que no cumple con los criterios y ratios de policías por cada mil habitantes. Una situación que no solo se da con la Policía sino también con los demás cuerpos de seguridad del estado que no llegan a los ratios establecidos y que sumen a la provincia en otro hoyo el de la seguridad que en definitiva es otra de las garantías que ofrece el estado.
No valdrá refugiarse en que en Zamora nunca pasa nada, porque si que pasa, los robos nocturnos, la inseguridad en la provincia con oleadas de asaltos a iglesias y bares como también ocurre en la capital denota que la desidia y la falta de recursos en la Zamora Vaciada se mantiene.
