En un ámbito en el que las medidas de seguridad ya eran muy altas, se han extremado con todos los equipos de protección y desinfección entre consultas.
Los centros de fisioterapia en Zamora llevan varias semanas trabajando con muchas medidas de protección y atendiendo las necesidades más urgentes en una vuelta a la normalidad que en algunos ámbitos empresariales será más complicada que en otros.
Los centros de fisioterapia y policlínicas, al ser sectores sanitarios, ya contaban antes de la irrupción de la COVID-19 con muchas de las EPIs que se usan habitualmente ahora como puede ser el caso de los guantes que ya eran de uso obligatorio. Las clínicas zamoranas han aumentado sus medidas de protección con el uso de gafas, mascarillas FFP2 y de mamparas de protección facial.
Aunque ya se usaban diversas medidas de desinfección en los boxes de tratamiento, como el uso de papel desechable en las camas de fisioterapia individual para cada paciente y la desinfección de los utensilios necesarios, estas medidas se han ampliado y se añade la alternancia entre los boxes de tratamiento para eliminar las posibilidades de contagio.
Como los mayores de 65 años son un público que requiere de estos servicios, las clínicas zamoranas les dan preferencia en las franjas horarias de 10 a 12 horas y de 19 a 20 horas, para así permitirles salir dentro de sus franjas.
Para asistir a los centros es obligatorio el uso de mascarilla, la desinfección de manos en la entrada de la consulta con los dispensadores que han sido situados a la entrada y se recomienda el pago con tarjeta. Además, las citas se ofrecen vía telefónica, por whatsapp o por redes sociales para evitar que haya que hacerlas en la propia clínica y así evitar aglomeraciones.
