jueves. 18.04.2024

Ni una colleja a tiempo ni nada parecido, cámaras de vigilancia para el patrimonio y contra este tipo de terrorismo patrimonial que veja lo nuestro. Eso aseguran los que ya no pueden seguir contemplando actos como los que dejan estas noches de gamberrismo y de "pintorrejeadores del patrimonio" que bien podrían hacerlo en sus propias casas, ya que en la de todos habría que preguntar al menos.

Pero no hay castigos ejemplares ni multas que se impongan y se conozca a los que vejan y destrozan tanto el patrimonio como el mobiliario urbano que pagamos todos, incluso los que atentan contra él.

El caso es que seguimos teniendo una más que desagradable visión de la ciudad en su casco antiguo con las pintadas y actos vandálicos que se suceden fin de semana tras fin de semana. Se ha cuestionado el afán recaudatorio de la Policía Municipal sobre todo en los fines de semana con sus controles de alcoholemia que nadie dice que no los tengan que hacer, pero se cuestiona también cual es la eficiencia en la ciudad al controlar los lugares que siguen siendo pasto de "pintorrejeadores de lo ajeno" el caso es que para reparar la fachada de la Subdelegación de gobierno en aquella pintada de los catalanistas se tardó poco o nada, pero Zamora sigue desprotegida totalmente contra pintadas y actos vandálicos que con quizá cámaras de vigilancia o más presencia donde todos tenemos claro que se necesita podríamos no tener la visión de por ejemplo la Iglesia de San Esteban.

Más de un transeúnte y no solo zamorano se intentaban explicar ayer el porqué de este atentado contra el patrimonio.

¿Hasta cuando los atentados al patrimonio?, la Iglesia de San Esteban sufre la pasada...