La Residencia San Agustín de Toro se engalanó ayer para celebrar el cumpleaños de Avelina, una de las residentes que pasa estos meses confinada en las residencias de mayores de Zamora y a la que la pandemia le impide ver a su familia. Pese a ello, los trabajadores del centro se esmeraron para que los 101 años fueran especiales.
Acostumbrados a festejar las cifras redondas, cumplir 100 años siempre es motivo de noticia, de celebración de familias muy extensas que se reúnen entorno a la mesa para celebrar el aniversario de la matriarca o patriarca de la familia. Sin embargo, en esta época de malas noticias, los 101 años de Avelina han servido para llenar un día de luz y alegría a toda una residencia.
En San Juan de Toro, los trabajadores del centro han puesto todo de su parte para que el cumpleaños de Avelina, que de normal lo habría pasado acompañada de su familia, fuera lo más feliz posible y le han acompañado en un día que, seguro, cuando pase la pandemia, tendrá una nueva celebración.
