El protocolo de la hermandad incluye un recorrido corto o dirigir los pasos hacia el museo en caso de que el agua haga acto de presencia.
Todo está ya a punto en la iglesia de San Lázaro. Aunque las previsiones meteorológicas por el momento son favorables e indican que la Cofradía de Jesús en su Tercera Caída podrá salir a la calle sin lluvia, la organización tiene previsto todo un protocolo de actuaciones en función de cómo se desarrollen los acontecimientos.
La intención de la organización, según confirma su hermano mayor José Fernández Nieto, es efectuar el recorrido procesional con normalidad si el tiempo lo permite. En el caso de que llueva a la hora de la salida, por estatutos, la organización debe esperar media hora para tomar una decisión, que pasa varias opciones.
Una de ellas es la de efectuar un recorrido corto evitando la calle Benavente y dando la vuelta por la calle Santiago a fin de agilizar la procesión en caso de que exista riesgo de lluvia.
La segunda opción en el caso de que un aguacero pueda sorprender a la procesión en sus tramos iniciales es la consigna de desviar hacia el museo cada uno de los pasos por el recorrido más acorde en función de su ubicación (arco de Doña Urraca, cuesta de San Vicente o San Torcuato).
La tercera y última posibilidad sería la de suspender la procesión en el caso de que la lluvia imposibilita se su celebración de forma que el cántico de la muerte no es el final se efectuaría en el interior de la iglesia de San Lázaro en un acto a puerta cerrada para los hermanos.
Desde la cofradía, con las previsiones que manejan, son optimistas y confían en que la procesión pueda desarrollarse con toda normalidad y esplendor.
