jueves. 18.04.2024

No pudo ser. La Real Hermandad del Cristo de las Injurias no ha podido realizar su procesión debido a la amenaza de lluvia.

Eran las 20.40 horas de la tarde cuando el presidente de la Cofradía del Sistema, Rufo Martínez de Paz, con el semblante serio y grave, anunciaba la suspensión de la procesión ante el riesgo de lluvia en su recorrido para salvaguardar la valiosa talla del Cristo de las injurias, el mejor crucificado del Renacimiento en España.

Una decisión dolorosa para quienes trabajan todo el año por la cofradía y también para los más de 2000 hermanos y devotos que se disponían a acompañar al crucificado por las calles, pero sin duda la más acertada ante un cielo amenazante y cubierto de nubes cargadas de agua.

Con los dos pebeteros ya en la Plaza de la Catedral y parte de los hermanos dispuestos en filas para el Juramento del Silencio, Rufo Martínez de Paz anunciaba asimismo la celebración de un Vía Crucis en el interior del templo catedralicio, que se ha visto colapsado por los centenares de personas que han accedido a su interior.

En silencio quedaba la Plaza de la Catedral y también la plegaria que el médico Juan Emilio Antón habría de pronunciar a los pies del Cristo, que será la ofrenda de silencio del año que viene.

Mientras el Cristo de las injurias regresaba al interior de la Catedral, los dos pebeteros eran evacuados por sus hermanos de carga hacia la sede de la cofradía, donde permanecerán guardados hasta el Miércoles Santo del próximo año

Con caras tristes y abrazos se consolaban unos a otros y se deseaban salud para que en el año 2020 brille el sol y el Cristo de las Injurias pueda salir en majestad por las calles de Zamora.

Y así, mientras caía la noche en Zamora y se efectuaba el rezo en la Catedral, se hacía el silencio en las calles. Un silencio distinto, de ausencia. Un silencio de lluvia y de vacío. Porque esta ciudad no es la misma si el Cristo de las Injurias no abre sus brazos desde la Cruz cada Miércoles Santo.

GALERÍA DE IMÁGENES Y VÍDEOS ( Marcos Vicente, Óscar Antón, Aroa Colmenero, Pablo Clemente)

 

Silencio de ausencia bajo la lluvia